Hoy es un día triste para nuestra entidad, para la familia del CNAB. Hoy nos ha dejado nuestro queridísimo Presidente de Honor, Alfons Cánovas Lapuente. Y nunca un cargo ha tenido tanto sentido. Porque vivió y nos deja con honor.
Con un carisma único y extraordinario, Alfons era de carácter firme, apasionado y luchador. Fue un gran defensor de los derechos civiles y de la libertad. Y, como no podía ser de otro modo, de nuestro barrio y de nuestros deportes.
Toda palabra se nos queda corta para describir lo que significa para nosotros el señor Cánovas. Es nuestra historia. Nuestra esencia. Dos caminos que han ido siempre de la mano. El suyo y el nuestro.
La suya ha sido una vida vinculada y dedicada al waterpolo, la natación y por encima de todo al CNAB. Socio emblemático que destacó primero como deportista, desde 1932, y después como directivo, desde 1952. Y ha sido gracias a su entrega incondicional y vehemencia que el CNAB hemos llegado a donde estamos ahora. Todos los éxitos tanto sociales como deportivos que hemos logrado son un fiel reflejo de su legado inigualable. Un legado que vivirá por siempre jamás y que tendrá los mejores embajadores, que son su hijo y nieto. Porque el apellido Cánovas en el Club es leyenda. Tradición y futuro.
El pasado 4 de noviembre cumplió 103 años. 103 años llenos de amor, de juicio y de CNAB. Por todo esto y mucho más, tenía todo nuestro aprecio y más profunda y sincera admiración.
Alfons, se nos hace muy difícil decirte adiós pero lo hacemos con una enorme sonrisa llena de amor. Es el mejor homenaje que te podemos hacer.
Con tu permiso Julián, muy buen viaje Presidente.
El velatorio tendrá lugar el domingo 7 de marzo de 14h a 21h en el Tanatorio Sancho de Ávila y la despedida el lunes 8 de marzo a las 11h en la iglesia de San Miquel en la Barceloneta.